26 de mayo de 2014

Las Puertas de Centro Miami

Los que han pasado por la 57 avenida cerca de Bird Road, habrán visto lo que parece ser las murallas y torres de un pequeño castillo y que muchos conocen como “el castillito de la 57 avenida”. En realidad son las puertas de entrada a un vecindario, que era conocido como Centro Miami (Central Miami) y que hoy se conoce como Red Bird al sur y Schenley Park al norte. La estructura original hoy es parte del Coral Gables Wayside Park.
Torre junto al Coral Gables Waterway
Fue durante el boom inmobiliario de la década de 1920 en que, dado el rápido crecimiento de Coral Gables, sus urbanizadores decidieron seguir construyendo hacia el oeste, ya fuera de los límites de la ciudad. La ciudad se expandía rápidamente y se creaban nuevos vecindarios que llevarían sus nombres en dependencia de su posición geográfica con respecto al núcleo urbano de Miami. Así surgieron South Miami, North Miami y West Miami, situados al sur, norte y oeste. Es un misterio cómo a los urbanizadores de esta zona al oeste de Coral Gables se les ocurrió ponerle Central Miami. En realidad la zona queda entre South Miami y West Miami y estaba muy lejos entonces de ser el centro de la ciudad. Tal vez  imaginaban que la ciudad crecería tanto como, de hecho, sucedió mucho más tarde. Esta zona vino a ser geográficamente el centro de Miami entre las décadas de 1960 y 1990. El nombre de Central Miami no se mantuvo por muchos años.
Torre y muro, al lado una de las casas construidas recientemente
El conjunto de las puertas tiene ocho torres y un pequeño muro. Fue construido en 1925 en el estilo mediterráneo, al igual que muchas estructuras semejantes en Coral Gables.  Las dos torres más grandes están a ambos lados del canal conocido como Coral Gables Waterway. Este canal fue concebido por los fundadores de Coral Gables como una vía navegable para que los vecinos pasearan en sus botes. Es de esperar que las torres sirvieran para dar la bienvenida a los que navegaban por el canal desde la vecina ciudad. Décadas después el Cuerpo de Ingenieros del Ejercito  los Estados Unidos colocó una compuerta y el canal hoy es solamente navegable hasta Bird Road. Dos torres más pequeñas están a ambos lados de la calle 34 y otras dos iguales a ambos lados de la calle 35. Las otras dos torres están en los bordes del conjunto.
Torre con farola
Todas las torres son decorativas, tienen forma cuadrada con una pequeña ventana rectangular a cada lado. Algunas tienen además una puerta. Las bases fueron construidas con piedra de corral, las cuales son visibles. El tope de las torres está decorado con agujeros en forma de corazones. Las torres tenían además unas farolas. El muro conecta una torre con la otra y sirve para delimitar el barrio. Aunque conservan su estructura, las torres están en bastante más estado. Parece que hace muchos años no se restauran, o tal vez nunca se haya hecho. La mayoría de las farolas se han perdido o no funcionan. Las paredes tienen manchas de humedad y plantas que han crecido. Las puertas que originalmente eran de madera, fueron sustituidas por unas de metal. Para colmo, en los últimos años se han construido casas muy cerca del muro lo que parece haber afectado a las estructura. Le toca al Condado Miami-Dade, bajo cuya jurisdicción está el parque, hacer algo para que no se pierda este pedazo de historia.  
Detalle de la farola
 
Ventana y base de una de las farolas perdidas
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Coral Gables Wayside Park: 5710 SW 35 St Miami, FL 33134
 
 
 

20 de mayo de 2014

La Torre de Agua Alhambra

Es común ver torres de agua en varias ciudades de la Florida. Pero lo que no es común es que la torre tenga forma de faro. Esto sucedió en Coral Gables, tras su fundación en la década de 1920, aprovechando el boom inmobiliario de entonces. La ciudad fue cuidadosamente diseñada y planificada por su fundador George Merrick siguiendo los cánones del estilo mediterráneo. La torre de agua ubicada en la calle Alhambra fue construida en 1924.
Una de las puertas
El agua se almacenaba en un tanque interno de acero. Este fue cubierto por una estructura de concreto y madera, puramente ornamental. La estructura asemeja a un faro y fue diseñada en el estilo morisco español. Fue comprada por la Consumers Water Company en 1926 y formó parte del suministro agua de la ciudad hasta que en 1931, la ciudad comenzó a tomar el agua del acueducto de Miami.  Estuvo abandonada por más de 20 años y en peligro de ser demolida cuando el ayuntamiento de Coral Gables la adquirió en 1958 para su preservación. Esto no ha evitado que, en varios momentos, la torre haya estado en mal estado. La mayor restauración se hizo en 1993, siguiendo las fotos de 1924. En el 2012 se hizo otra restauración que incluyó las puertas, ventanas, el sistema eléctrico, las escaleras y barandas. Para esta última se estuvieron recogieron donaciones.
Cúpula y balcón superior
La torre sobresale por encima de toda la zona residencial al noroeste de Coral Gables, donde las casas no superan los dos pisos. Tiene una base cuadrada más ancha, una puerta y dos ventanas en los lados opuestos. Luego le sigue un primer balcón con baranda de madera y el resto de la estructura octagonal con pequeñas ventanas estilo morisco. El segundo balcón está justo antes del tope el cual termina en una cúpula de cristales. En su pared sur tiene un reloj solar que fue parte del diseño original y que todavía funciona. En las puertas que dan acceso al primer balcón hay una pintura al freso con un anagrama con una palma y las siglas CG por Coral Gables.
Anagrama de Coral Gables sobre la puerta del  primer balcón
 
 
Puede ser visitada desde sus jardines aledaños, pero es una lástima que no esté abierta para explorarla por dentro. Al menos una vez a la semana, la ciudad pudiera programar visitas guiadas y permitir el acceso a la torre. Esto ayudaría a recaudar fondos para su mantenimiento y ofrecería la oportunidad de ver la estructura por dentro y disfrutar de la vista que debe verse desde el balcón superior. Una placa en los jardines, narra la historia de la construcción y conservación de la torre.
 
Reloj de sol
 
 
 
 
Alhambra Water Tower: Alhambra Circle, Coral Gables, FL 33134

4 de mayo de 2014

El Museo de Arte “Pérez” de Miami

El Museo de Arte “Pérez” no solo es el más moderno de Miami sino el más controversial. La controversia viene desde que comenzaron los trabajos de construcción en 2010 y el financiamiento de la obra fue a la boleta en las elecciones ya que el condado Miami-Dade financió gran parte con un bono de la deuda pública. A esto le siguió el nombre, tras la donación que hiciera el magnate de la construcción Jorge M. Pérez. A muchos les molestó que el museo, financiado en su mayor parte con fondos públicos, y construido en un terreno que es propiedad de la ciudad, llevara el nombre de un donante privado. Por si fuera poco en febrero,  a solo dos meses de su apretura, un artista local rompió un jarrón obra del artista chino Ai Weiwei y valorado en un millón de dólares, en protesta porque no se exponían a los artistas locales.
Vista frontal del edificio
 
 El museo tiene su antecedente en el Centro de Bellas Artes (Center for the Fine Arts) de 1982 hasta 1996 luego llamado Museo de Arte de Miami (Miami Art Museum) de 1996 hasta el 2013. Este estaba ubicado en el Centro Cultural de Miami-Dade en la Calle Flagler en el downtown, como parte del complejo que comparte el museo de historia (History Miami) con la biblioteca pública principal (Miami-Dade Public Library). El edificio actual se construyó en los terrenos del antiguo Parque del Bicentenario (Bicentennial Park) frente la Bahía Biscayne. Es parte de un complejo, todavía en construcción, que incluye el Museo de Ciencias y un parque (Museum Park). El resto del conjunto debe estar terminado para el 2015.
Jardines colgantes
 
 
El edificio, diseñado por los suizos Herzog y De Meuron, es una maravilla de la arquitectura contemporánea. Con líneas simples, que recuerdan en algo al estilo orgánico de Frank Lloyd Wright, se combina perfectamente el inmueble con los jardines, el paisaje y la bahía. Con mucha amplitud en sus espacios exteriores en cuanto a terrazas, pasillos, escaleras lo que hace que el calor, típico de Miami, apenas se sienta. Los jardines colgantes verticales son otra maravilla al haber logrado hacerlos con plantas locales, en un diseño también único en esta ciudad. Una gran escalinata de concreto baja desde la terraza posterior hasta la orilla de la bahía lo cual le permite al visitante sentarse a contemplar una de las mejores vistas de Miami. En el diseño interior se usa mucho la madera y la iluminación natural con grandes ventanas.
Sin embargo tengo que decir que la colección permanente del museo deja mucho que desear para un edificio tan bueno. En el diseño interior parece que se le dio más importancia a los espacios sociales que a las exhibiciones. El primer piso está ocupado casi completamente por el lobby, la tienda, un restaurante y un auditorio-teatro. El espacio de exhibición en este piso se limita a dos pequeñas salas. Los asientos del auditorio-teatro van subiendo hasta el segundo piso. Es en este donde hay más salas de exhibición pero cuando uno termina de recorrerlas, se queda con ganas de seguir y ya no hay más. El tercer piso solo está ocupado por aulas y oficinas.
"Para aquellos que peligran en la mar" obra de Hew Locke en el lobby del museo
En los pocos meses que lleva abierto han pasado buenas exposiciones temporales (Weiwei, Amelia Peláez, arte de Haití) pero la ciudad se merece una mejor y más variada colección permanente. Si bien no es el único museo de arte en el área de Miami, este es el más visible, el mejor situado y por tanto el más visitado. La mayoría de la obras son muy contemporáneas no dejando casi nada a estilos anteriores. Es cierto que carece mucho de artistas locales y de una panorámica de la historia del arte en el sur de la Florida, que ha sido hogar de importantes artistas por más de un siglo. En un recorrido por las galerías privadas de cualquiera de los circuitos de arte de la ciudad, se pueden apreciar mejores y más variadas obras. Un espacio así debe ofrecerle más a los niños, estudiantes de arte y a los vecinos de Miami-Dade que financiaron parte de la obra. Si se compara con museos semejantes en otras grandes ciudades, se le dará la razón a los que dicen que Miami no es aún una plaza a tomar en serio en las artes.
"El tren de la palma" del pintor cubano Carlos Enriquez
En mi opinión el museo, a pesar de su magnífica arquitectura, fue diseñado en función de los eventos sociales que allí se hacen. Cocteles, recaudaciones de fondos, subastas y fiestas parecen ser lo que perfectamente cabe en los espacios exteriores. No es que estén mal estos eventos pero el público amante de las artes debe tener más que ver en un museo que pretende representar a una ciudad de más de dos millones de habitantes. Esperemos que los directores y curadores se den cuenta y amplíen la colección.  Mientras tanto, vale la pena darse una vuelta, al menos por el edificio.
Perez Art Museum Miami: 1103 Biscayne Blvd. Miami, FL 33132
 
Vista lateral de la terraza

1 de abril de 2014

El Sendero Pahayokee o el Río de Hierba

Mientras más uno se adentra en los Everglades, otros nuevos paisajes aparecen. Dejando atrás el Cayo Pino Largo, se entra en una zona de pequeños bosques de cipreses calvos. Estos árboles durante la temporada seca del invierno adquieren un color blanco como si estuvieran cubiertos de nieve. El sendero Pahayokee comienza en uno de estos bosques y ofrece una de las mejores vistas del pantano. Pahayokee significa río de hierba en lengua seminola y es precisamente así como se le conoce a la mayor parte de la ciénaga que está cubierta de la hierba que crece sobre el agua de baja profundidad.  
Bosque de cipreses
El sendero de 0,16 millas (260 metros) comienza en un pequeño bosque de cipreses y se adentra en el mismo por un paso elevado de madera. El recorrido continúa con una escalera entre los cipreses que da acceso a un mirador más elevado aún. El mirador, que tiene un techo, ofrece vistas increíbles de la pradera húmeda formada por la ciénaga del Río Tiburón (Shark River). Esta corriente de aguas bajas se desplaza lentamente hacia el Golfo de México. Justo frente al mirador, el río tiene unas ocho millas de ancho.
Escalera al mirador
 
 
La pradera está cubierta principalmente por la hierba serrucho (sawgrass), nombrada así por los dientes de los bordes de sus hojas. En el suelo se pueden ver los agujeros de solución que sirven como recipientes de agua, muchas veces son los únicos en época de sequía. En medio de la pradera hay pequeñas arboledas tropicales que sirven de hábitat para diversas especies. Las más visibles son las garzas blancas que suelen posarse sobre los cipreses.
Paso elevado
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Pahayokee Overlook: a 13 millas del Centro de Visitantes Ernest Coe.

20 de marzo de 2014

Antigua Base de Misiles Nucleares en los Everglades

Tan pronto terminó la Crisis de los Misiles (octubre  de 1962), en el punto más alto de la Guerra Fría, se construyeron varias bases de misiles para la defensa ante un posible ataque aéreo. El sur de la Florida, por su cercanía con Cuba, era uno de los lugares más estratégicos para ello. El Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos construyó una base de misiles dentro del Parque Nacional de los Everglades que fue terminada en  1964. La base era conocida como HM69 o Batería Alfa (Alpha Battery). Era parte de un complejo sistema de defensa que incluía otras tres bases: la Batería B en el norte de Key Largo, la C en Miramar y la D en la avenida Krome. Pero fue la HM69 la que más tiempo estuvo en uso y es la única que ha sobrevivido hasta hoy.
Centro de control de fuego integrado
 
La base es un conjunto de 22 edificios y estructuras localizadas en dos áreas: el centro de control de fuego integrado y la plataforma de lanzamiento. En la primera no solo estaban los controles de la base sino también los radares, la comandancia, una capilla, el comedor y las barracas de los soldados. A una milla de distancia estaba la plataforma de lanzamiento con los tres hangares donde se guardaban los misiles. Además la plataforma incluía refugios, un edificio para el ensamblaje de los cohetes y una perrera. Toda la base estaba protegida por una alambrada doble y era constantemente custodiada por guardias con perros. El acceso era bien limitado y varios carteles advertían que no se podían hacer fotografías o tomar notas desde el exterior. Las órdenes de los centinelas ante la presencia de un intruso eran “disparar y luego hacer las preguntas”.
Hangar donde se guardaban los misiles
Los misiles tipo Nike Hercules eran para la defensa antiaérea. Tenían un alcance de 100 millas (160 Km) y alcanzaban una velocidad de 3000 mph (4800 Km/h). Su alcance no les permitía llegar hasta Cuba pero sí podían interceptar misiles balísticos, aviones de combate e incluso una flota de barcos en el Estrecho de la Florida. Tenían capacidad para una ojiva nuclear de 20 kilotones. Esta base estuvo activa hasta 1979, siendo una de las ultimas en ser cerradas cuando este tipo de misiles se volvieron obsoletos.
Edificio de ensamblaje
La antigua base solo puede recorrerse con un guía del Parque Nacional Everglades todos los días a las dos de la tardes desde diciembre hasta abril. El recorrido es ameno e instructivo y se centra mucho en la historia de la Guerra Fría y la importancia que tuvieron estas bases y en los hombres que sirvieron en ellas. El tour comienza en el centro de control de fuego integrado y luego se va hacia la plataforma de lanzamiento. Allí se visitan las instalaciones, casi intactas. En el edificio de ensamblaje, se conserva el dibujo de un misil hecho por los soldados. En la calle también está el dibujo de un enorme mosquito, que era sin dudas la principal molestia para los soldados.  En unos de los hangares se conserva un misil en perfecto estado. Este fue traído de una base en Alabama y restaurado para su exhibición. También se exhiben componentes de los misiles así como paneles de los instrumentos de control. La base es una reliquia única de la Guerra Fría que merece ser visitada.
Refugio
 
 
 
 
 
Nike Missile Base: Centro Daniel Beard a unas 15 millas del Centro de Visitantes Ernest Coe

12 de marzo de 2014

El Sendero del Pinar (Pineland Trail)

Tal vez la mejor manera de conocer los bosques de Cayo Pino Largo es recorriendo el Sendero del Pinar (Pineland Trail). El caminante puede internarse en el bosque de pinos y descubrir el paisaje con el que hasta finales del siglo XIX estuvo cubierto casi todo el terreno sólido del sur de la Florida. Luego la mayoría de estos bosque fueron talados y el terreno rellenado para la agricultura o el desarrollo urbano. Estos pinares de suelo rocoso solo se encuentran en el sur de la Florida, los cayos y en algunas islas de las Bahamas. En Miami quedan algunos que están designados como parques o áreas protegidas por el condado.
Tronco de un pino
 
 
 
El suelo es de roca caliza, la cual queda casi cubierta por la vegetación. La roca tiene hoyos, como si fueran pequeños cráteres. Algunos llegan a ser verdaderos pozos estrechos e interconectados unos con otros. La vegetación está compuesta principalmente por pinos, muchos de ellos alcanzando grandes alturas. La mayoría del espacio entre los pinos está cubierto por una palmera baja conocida como palmito o hierba serrucho. También hay un pequeño arbusto venenoso de hojas verdes que puede causar irritaciones en la piel, por lo que es mejor no acercársele.
 
El sendero de 0,4 millas (650 metros) comienza en al lado de una caseta que sirve para protegerse de la lluvia. Dentro de la caseta hay unos gráficos donde se explica cómo desastres naturales como los huracanes y los incendios sirven para regular el ciclo de vida de este tipo de bosque tropical. El sendero está pavimentado, es estrecho y con muchas curvas. Esto puede resultar incómodo, sobre todo si se uno se cruza con un grupo de caminantes haciendo el recorrido en dirección contraria.
 
Uno de los agujeros en el suelo

El bosque
No se recomienda internarse en la maleza fuera del camino debido a los agujeros en la roca. Durante el recorrido hay carteles que explican las características del bosque. Uno de estos señala a cuatro especies de serpientes venenosas de las cuales, afortunadamente, no vimos ninguna. Una lástima fue no haber visto a alguno de los pájaros carpinteros que habitan en los pinos. La especie más rara  del pinar es el caracol de árbol Liguus, pero solo son visibles después de un día lluvioso cuando salen a arrastrarse por los troncos de los pinos.  
Pineland Trail: a 7 millas (11 Km) del Centro de Visitantes Ernest Coe

8 de marzo de 2014

Cayo Pino Largo (Long Pine Key)

Otro paisaje inesperado e increíble de encontrar en medio de los Everglades es el Cayo Pino Largo (Long Pine Key), una extensa isla cubierta por un bosque de pinos. La isla es atravesada por la carretera principal del parque y puede ser visitada en varios sitios. El más grande es el Campamento Long Pine Key localizado a 7 millas (11 km) de la entrada del parque.
En el lago, un cocodrilo cerca de la orilla, mientras echan una canoa al otro lado









Al campamento se accede desde la carretera principal, por un camino que ofrece vistas únicas del bosque. Los pinos se distinguen por su altura y troncos delgados. El suelo entre ellos está cubierto de vegetación, principalmente palmeras bajas. El camino de acceso termina en un pequeño lago. A un lado hay mesas de picnic, baños y estacionamiento. El lago puede recorrerse por un sendero de tierra que bordea su orilla. Aparentemente apacible, el lago oculta sorpresas. Si el visitante observa en detalle podrá ver unos cuantos cocodrilos, algunos bien cerca de la orilla. Esto no impide que algún que otro visitante se atreva a lanzar una canoa.
RVs al otro lado del lago
Al otro lado está el campamento con 108 espacios para tiendas de campaña o casas rodantes (RVs). El acceso se controla desde una caseta donde se cobra los cargos por acampar. El sitio está abierto desde noviembre hasta mayo y es bien popular a juzgar por la cantidad de campistas. Long Pine Key también puede ser recorrido a través de varios senderos.
Caseta donde se cobra la entrada al campamento









Long Pine Key: 7 millas (11 Km) del Centro de Visitantes Ernest Coe

5 de marzo de 2014

El Sendero del Almácigo (Gumbo Limbo Trail)


Una de las cosas más sorprendentes de los Everglades es la diferencia que hay entre un paisaje y otro, muchas veces bien cerca. Justo al lado del Anhinga Trail está el sendero del Almácigo, una jungla tropical completamente distinta al pantano. De hecho, el sendero ocupa parte de una isla de suelo rocoso antiguamente conocida como Cayo Paraíso (Paradise Key) y que fuera propiedad de Henry Flagler.  
Troncos de almácigo
 
 
 
 
 
El recorrido también comienza en el Centro de Visitantes Royal Palm y se extiende por 0,4 millas (600 metros) por un estrecho camino pavimentado. Aunque parezca una distancia corta, estamos hablando de un sendero totalmente cubierto por la sombra de la vegetación, donde el camino tiene muchas curvas y da la sensación de que se camina una distancia mayor.
Agujero de solución
 
El sendero lleva el nombre del almácigo, un árbol maderable muy común en el sur de la Florida. Su tronco rojo, muchas veces descascarado, lo hace bien llamativo entre el resto de la vegetación. También abundan las palmas reales, los helechos, las hiedras venenosas y algún que otro roble. No se ven animales, aunque algunos entusiastas de la observación de aves se esfuerzan por encontrar algunas en el tope de los árboles.  En el suelo de rocas, se puede ver un gran charco de agua estancada, conocido como agujero de solución,  que es formado por la erosión provocada por la lluvia.  
La sombra del camino
 
 
Es un menos popular que el Anhinga Trail, por lo que es una excelente oportunidad para caminar más tranquilo en medio de la naturaleza. Casi al final, el sendero atraviesa la antigua carretera Ingraham que era la vía sin pavimentar que originalmente unía a Homestead con Flamingo. Hoy es un sendero más ancho, en medio de la selva, que puede ser recorrido en bicicleta.  
Gumbo Limbo Trail: a 4 millas (6 Km) del Centro de Visitantes Ernest Coe

3 de marzo de 2014

El Sendero Anhinga (Anhinga Trail)

Este es el primer sendero de los Everglades y no solo el más visitado, sino el más espectacular por la variedad de especies que pueden verse. Está a solo cuatro millas (6 Km) de la entrada del parque, en la zona conocida como Royal Palm. La presencia de una abundante fauna se nota desde el mismo estacionamiento, donde un letrero advierte  que los buitres pueden dañar su vehículo.
El recorrido comienza en el pequeño Centro de Visitantes Royal Palm. Desde allí un sendero pavimentado se interna en el pantano. Es una porción del antiguo camino entre Homestead y Flamingo, terminado en 1914. En ese entonces lo habitantes de la zona iban de excursión por este camino en autos Ford modelo T. Eran excursiones no exentas de riesgo por las frecuentes inundaciones que interrumpían el camino. Fue justamente aquí que, en 1916, la Federación de Clubes de Mujeres de la Florida fundó el Parque Estatal Royal Palm, en lo que entonces se conocía como Cayo Paraíso (Paradise Key). Este fue luego parte del Parque Nacional de los Everglades,  al ser fundado este en 1947.
Sendero pavimentado
Paso elevado de madera
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
El sendero tiene una extensión de 0,8 millas, unos 1200 metros, los cuales se recorren sobre el pavimento y un paso elevado de madera. El sendero se adentra en el pantano, parte de la ciénaga conocida como Taylor Slough que tiene abundante agua durante todo el año, lo que atrae a un gran número de especies. A lo largo el sendero hay bancos donde el caminante puede sentarse a contemplar las impresionantes vistas del río de hierba. También hay techos donde guarecerse del sol y varios carteles que indican características del lugar.
Cormorán orejón
Tan solo dar unos pasos ya se comienza a interactuar con los animales. La anhinga, también conocido como pájaro aguja americano, es la que le da nombre al  sendero. Se les puede ver sobre los arboles con las alas extendidas y de espaldas al sol para secarse. Más espectacular aún es ver como se sumergen en el agua y nadan para atrapar peces. El ave más amistosa es el cormorán orejón el cual se posa sin temor, lo mismo encima de las barandas que de uno de los techos. También se pueden ver buitres al acecho de alguna presa. Entre la hierba del pantano caminan las grasas blancas y las grullas. En el agua hay gran variedad de peces, siendo el más llamativo el Florida gar. También podemos ver tortugas de agua dulce y por supuesto, gran cantidad de cocodrilos de todos los tamaños.
El pantano


Cocodrilos (alligators)
El cocodrilo conocido como aligátor (alligator) es una especie de agua dulce que se caracteriza por su color oscuro y por el gran tamaño que pueden alcanzar. Se pueden encontrar en todo el sur de los Estados Unidos y son bastante communes en el delta del Mississippi y en toda la Florida. Sin dudas es el rey de los Everglades,  siendo el más temido y a la vez buscado de sus habitantes.
Garza en el río de hierba
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Anhinga Trail: a 4 millas (6 Km) del Centro de Visitantes Ernest Coe